Como Coaches de DESAFIO creemos que la riqueza principal de las empresas
son los hombres que la componen y en el desarrollo integral que éstos deben tener.
Sostenemos que el desarrollo económico y financiero de cualquier emprendimiento
es y debe ser compatible con la valoración, el respeto y el crecimiento de sus
integrantes.
Ponemos nuestra actividad como coaches y consultores de Desafío -y con ello
nuestra experiencia, formación y trabajo- en ella labora, contribuyendo a generar recurrentemente interacciones basadas en la confianza, promoviendo que cada cual desarrolle permanentemente sus mejores talentos y adquiera crecientemente ”dominio propio”, a través de la superación y la transformación personal. Creemos, en consonancia con lo anterior, que la transformación de las empresas pasa por el cambio de prácticas y las relaciones entre las personas. Creemos también que la calidad de las empresas está determinada a su vez por la calidad de las relaciones y las conversaciones que se desarrollan en su interior. Creemos, en suma, que es posible generar, a través del aprendizaje transformacional que promovemos y a cuyo servicio estamos, un cambio cultural de la empresa, en donde impere la transparencia, la confianza, la mirada respetuosa de si mismo y del otro, superando hábitos tales como los prejuicios, las rutinas defensivas y las conversaciones ambiguas o maliciosas.
En fin, inspirados en en el espíritu de Fundación Desafío, queremos colaborar con nuestros servicios a que el empresario, el gerente, el dirigente de las empresas a quienes servimos, cumpla su vocación, en provecho de una empresa que garantice su viabilidad presente y futura, al tiempo que promueva en sus dirigidos y colaboradores el bienestar material, el desarrollo personal y profesional.
Colaboramos, junto con Fundación Desafío en que esos directivos sean líderes integrales, que se constituyan en modelos para clientes y colaboradores.
